Los habitantes del México prehispánico se alimentaban con una gran diversidad de insectos: gusanos de maguey, escamoles, chapulines, ahuahutle, axayacatl y jumiles, que provenían tanto del medio terrestre como del acuático, asegura José Manuel Pino Moreno, entomólogo del Instituto de Biología de la UNAM.
En las Cartas de relación y en la Historia verdadera de la conquista de la nueva España, Hernán Cortés y Bernal Díaz del Castillo relatan que durante la comida hasta 25 guisos en pequeñas porciones le eran servidas a Moctezuma II, el gran Tlahtoani mexica. Los platillos se preparaban con diversos ingredientes; por ejemplo, pato, guajolote, legumbres, maíz tostado, frijoles, frutas, pan de la tierra (como llamaron a la tortilla y al tamal), quelites, capulines, algas, tunas, cacao, chiles secos, vainilla, calabaza, maguey y flores.
De acuerdo con Pino Moreno la dieta de los habitantes del México prehispánico era variada; aprovechaban todos los recursos vegetales y animales de su entorno mediante la caza y la recolección. También se alimentaban con una gran diversidad de insectos: gusanos de maguey, escamoles, chapulines, ahuahutle, axayacatl y jumiles que provenían tanto del medio terrestre como del acuático.
En relación con el impacto que tuvo la Conquista en la dieta de los antiguos mexicanos, el investigador universitario aseguró que algunos alimentos fueron calificados de manera negativa, “y, por tanto, olvidados y con frecuencia despreciados. Ciertos alimentos, como el amaranto, se proscribieron o limitaron su cultivo y consumo, y de ese modo se alteraron los hábitos alimentarios tradicionales. Al mismo tiempo que arrasaban con la religión y la lengua de los pueblos también lo hicieron con parte de sus costumbres culinarias”.
Fue un encontronazo, incluso los frailes evangelizadores trataron de impedir que las personas comieran tortilla, chile y a veces frijol y calabaza consideró el entomólogo, “pero la cocina mesoamericana sobrevivió en las comunidades o grupos étnicos.
Algunos de los insectos comestibles que más se han investigado exhaustivamente, son los chapulines, indicó Pino Moreno, un conjunto de especies pertenecientes a diversos géneros, escamoles gusanos de maguey blanco y rojo, hormigas chicatanas, , jumiles, huevecillos y adultos de hemípteros acuáticos de los géneros
Actualmente, en diversos países y en México los insectos forman parte de la gastronomía y se han convertido en platillos gourmet, incluso muchos chefs han elaborado recetas como el ingrediente principal.